El estado de Jalisco enfrenta una crisis de desapariciones que ha persistido, al menos, desde inicios del sexenio de López Obrador. En sólo 6 años desaparecieron y permanecen sin localizar 9,086 personas. Sin embargo, los últimos meses de 2024 mostraron una inesperada reducción en el número de desapariciones reportadas, justo en la transición entre el gobierno de Enrique Alfaro y la administración de Pablo Lemus. Este fenómeno plantea algunas dudas: ¿es resultado de una manipulación de cifras o de un cambio real en la dinámica del crimen organizado? Jorge Ramírez Plascencia, profesor-investigador de la Universidad de Guadalajara, analiza los factores clave de este fenómeno.